Llega la noche y justo cuando empiezas a quedarte dormido empiezas a toser impidiendo que tengas un descanso óptimo. La tos nocturna puede ser síntoma de gran variedad de causas, siendo uno de los síntomas de la gripe o alergias entre otros. Puede ser verdaderamente molesto para ti y los tuyos, y tener como consecuencia fatiga, o falta de concentración, impidiendo que puedas cumplir con tus tareas diarias con normalidad.
¿Qué es la tos nocturna y por qué se produce?
La tos es un reflejo de nuestro organismo que aparece cuando los receptores distribuidos por nuestro aparato respiratorio entran en contacto con estímulos1 inflamatorios, ambientales, químicos o infecciosos. Esto provoca que nuestro cerebro mande una señal a nuestro sistema respiratorio para expulsar el aire a mayor velocidad para eliminar aquello que inició el reflejo de toser y mantener la garganta y vías respiratorias despejadas. Entre las causas más habituales de la tos nocturna están2:
- Alergias
- Asma
- Resfriado o gripe
- Infecciones pulmonares como bronquitis o neumonía
- Sinusitis
- Enfermedad del reflujo gastroesofágico
Por otro lado, la tos puede dividirse en dos tipos de tos:
- Tos húmeda: o tos productiva con exceso de mucosidad en garganta, pulmones y boca
- Tos seca: no hay mucosidad que expectorar, un cosquilleo en la garganta hace que se sienta la necesidad de toser. Esta suele prolongarse en el tiempo y suele ser uno de los síntomas de la gripe o resfriado.
Una de las razones principales por las que tosemos más por la noche es debido a la postura. Al estar acostado la mucosidad se acumula en nuestra nariz y con ello tendemos a respirar más por la boca lo que hace que la garganta se nos reseque más, sintamos un cosquilleo y picor y esto inicie el irritante bucle de tos nocturna.
La tos nocturna es verdaderamente fastidiosa y puede impedirnos conciliar el sueño y con ello obtener el descanso que necesitamos cuando nuestro organismo se está enfrentando a una infección respiratoria. El descanso ayuda a nuestro sistema inmune a trabajar mejor contra los síntomas de la gripe como la tos, la fiebre, dolor de cabeza o cuerpo cortado. Es importante ponerle remedio lo antes posible y así garantizar que nuestro organismo está en condiciones para enfrentarse a las infecciones.
Formas de aliviar la tos nocturna:
- La postura es importante a la hora de descansar y evitar la tos seca, por lo que puede ser recomendable elevar la cabeza y el cuello.
- Mantente hidratado mantener la garganta hidratada puede ayudarte a evitar la sensación de irritación que suele desencadenar la tos nocturna
- Bebida caliente: puede ayudarte a aflojar la mucosidad y calmar la irritación de la garganta
- Baño caliente: puede ayudarte a aflojar la mucosidad y despejar las vías respiratorias.
- Antihistamínicos: si tu tos se trata de una respuesta a alergias.
- Descongestionante: Puede ayudarnos a evitar el goteo postnasal que nos provoca tos nocturna.
- Analgésicos: como el paracetamol con función analgésica para la garganta y otros síntomas de la gripe como el dolor de cabeza.
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